Vuelve la gabardina de toda la vida. A decir verdad, nunca se había ido.
De unos años a esta parte, ha sido rebautizada como trench. Su nombre procede de las gabardinas que utilizaban los soldados del ejército británico en las trincheras durante la primera guerra mundial.
El trench es otra de esas prendas que no debería de faltar en ningún armario.
Al igual que ocurre con otras prendas icónicas, si solo pudiera escoger un modelo y color me decantaría por el más clásico, en este caso el color camel. Una vez que tengas esta prenda en un color básico, si quieres puedes animarte a explorar versiones más arriesgadas. Si el precio no fuera un inconveniente, escogería el de tela de gabardina de la mítica casa inglesa Burberry con su forro de tartán. El trench ha hecho que Burberry trascienda todo tipo de modas y haya cumplido más de 156 años de historia. Christopher Bailey (director creativo de la firma) ha cumplido con creces su misión de dar un lavado de cara a la casa británica renovando sus prendas clásicas. De esta forma, ha logrado atraer a un público más joven y conservar al público tradicional. No tenemos más que fijarnos en las apuestas presentadas en los últimos años, un derroche de imaginación y estilo, desde los colores utilizados, hasta los tejidos. Sin embargo, hoy en día existen multitud de modelos de diferentes marcas y precios al alcance de todos los bolsillos.
De esta prenda destacaría su versatilidad. Va igual de bien con unos vaqueros con bailarinas o taconazo y una camiseta de rayas (que como sabéis es otra de mis prendas fetiche), que colocado sobre los hombros para complementar un look de fiesta très, très cool.
Sus posibilidades son casi, casi infinitas. Os sugiero llevarlo con el cinturón anudado, las mangas remangadas y el cuello ligeramente subido para conseguir ese efecto décontracté.
Una prenda que te saca de cualquier apuro – elegante y nada complicada – con la que darás una imagen legendaria.
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Una respuesta a La gabardina de toda la vida ahora se llama “trench”