El tiempo en Bruselas es muy cambiante. Igual puede sorprenderte un día primaveral en pleno invierno que pasarse todo el verano lloviendo con un frío que pela. Alguien me dio un sabio consejo: “cuando hace bueno en Bruselas tienes que dejar todo lo que estés haciendo y salir “. Este fin de semana seguimos el consejo; cogimos un tren sin pensarlo y nos fuimos a Mons. Está solo a 40 minutos de Bruselas y además este año es Capital Europea de la cultura. Nos encantó.
Antiguo centro minero, Mons está en proceso de regeneración y de metamorfosis para convertirse en una especie de “Creative Valley“. Con un bagaje histórico importante y un rico patrimonio arquitectural y cultural, su pasado industrial y su centro histórico conviven con la modernidad. La colegiata de Sainte-Waudru, de estilo gótico del s. XV, con espléndidas vidrieras y el campanario de estilo barroco, patrimonio de la humanidad son unas auténticas joyas. Este año hay muchísimas exposiciones y eventos culturales. La más destacada es la exposición de Van Gogh, que durante su estancia en la región a los 25 años decide dedicarse por entero a la pintura. También os recomendamos visitar la Maison Folie, centro de experimentación artística lleno de artistas en plena creación (tiene un café para tomar algo, comer o cenar que está super bien).
Os sugerimos pasearos sin rumbo fijo por la ciudad y descubrir sus muchos rincones medio ocultos. Compartimos con vosotros en este post nuestro paseo por Mons.