Me he dado cuenta de que en todo el tiempo que llevo escribiendo este blog aún no había hecho ningún post sobre Bruselas, nuestra ciudad desde hace ya varios años. Eso no puede ser.
Hoy os voy a mostrar un sitio que se ha convertido en mi refugio en muchas mañanas de domingo. Lo descubrí gracias a mi amiga y compañera de trabajo Ana, que tiene incorporado un radar para detectar cosas 10 (estamos tratando de captarla para el blog :-)). Si ella no me lo recomienda no creo que lo hubiera descubierto porque está en una calle lateral y aunque había pasado cerca muchas veces no me había fijado.
¡Por fin un sitio donde se puede tomar un buen desayuno o una buena merienda en Bruselas! (sin tener que ir siempre al Pain Quotidien).
La Mercerie es un sitio muy especial. Ubicada como su nombre indica, en el local de una antigua mercería, tiene una atmósfera a medio camino entre el imaginario de Alicia en el país de las maravillas y un salón vienés. El espacio es muy relajante y luminoso. Voy a menudo para hacer tiempo cuando mi hijo tiene un cumpleaños cerca de allí en el Museo del niño. Me encanta ir temprano cuando casi no hay nadie.
Se puede ir a desayunar, hacer un brunch, comer, merendar, o ir a tomarse un té a la manera inglesa… Los sabores son muy originales con productos locales y bio. Está todo delicioso: el brunch dulce, el brunch salado, los pasteles, las bebidas y zumos, los tés… Yo me suelo tomar el brunch sucré con scone, yogurt, croissant, macedonia de frutas, su limonada especial o un smoothy y té blanco. Además tienen prensa para leer, incluía española. Y son muy amables.
Ojo con los horarios porque abre solo jueves y viernes (10am-6pm) sábados y domingos (9.30am-6pm)). 
En su web dicen que buscaban crear un lugar donde el tiempo pasara más despacio. Y a mí me encantan ese tipo de lugares…
Porque sabéis que a veces el tiempo se para ¿no?
